domingo, 11 de diciembre de 2011

Dos entrenamientos semanales

Hace una porrada de tiempo, allá por los 24 años, hice mi primera tavesía en compañía de mi padre, al que no me hizo mucha falta persuadir, su afición a la natacion veraniega me lo puso fácil. Estábamos de turismo en San Sebastian en la playa de Ondarreta, la parte mas occidental de la famosa playa de la Concha y nos decidimos a pasar nadando hasta la isla de Santa Clara, son poco mas de 350 metros ida más otros de vuelta tras un pequeño descanso. Mi padre sólo dominaba la braza, y su ritmo lento no me permitía entrar en calor, os recuerdo que soy muy friolero, y en el regreso llegué un poco destemplado. No parezco hijo suyo ya que él siempre encontraba el agua buena. En Sanse el agua está en verano, generalmente por encima de los 21º, quién los pillara. Desde aquel día ví que la natación también permitía hacer turismo.
Soy un amante de los deportes que permiten hacer turismo, cicloturismo, kayak turismo, senderismo y ahora también la natación lo permite gracias a los avances en trajes de neopreno, que te permiten estar algunas hora en el agua y desenvolverte con cierta soltura.

Dos son los entrenamientos semanales que me he propuesto realizar a partir de ahora, hay que empezar a meterle metros al cuerpo. Cuatromil metros en dos sesiones, utilizando por primera vez manoplas y aletas simultaneamente, asi como ejercicios de técnica respiratoria y nado libre. No acabo de encontrarme cómodo con aletas, siempre he sido de poca patada y me cuesta mucho forzarla. Con las manoplas (guantes con dedos unidos por membrana típica de pata de palmípedos) me apaño mucho mejor, podría hacerme la travesía con ellas pero nunca soportaría las aletas. Curiosamente he podido hacer 500 metros con las manoplas respirando cada 4 brazadas, cosa que hasta ahora sólo lo conseguía durante un par de largos a manos libres. ¿Quén me lo puede explicar?.

1 comentario: